La descarbonización en el ámbito automotriz no puede abordarse de manera fragmentada. Para un vehículo, es fundamental considerar su ciclo de vida completo, desde la producción hasta el final de su uso, abarcando cinco ejes clave: ecodiseño, elección de recursos, fabricación, uso y disposición final. En este contexto, Renault ha presentado su nuevo modelo Emblème, desarrollado por Ampere, que representa un enfoque integral hacia un vehículo familiar con una huella de carbono significativamente reducida.
El Renault Emblème se destaca por emitir un 90% menos de gases de efecto invernadero (CO2e) durante todo su ciclo de vida en comparación con los estándares establecidos en 2019. Cada decisión técnica y estilística del vehículo ha sido guiada por un riguroso pliego de condiciones destinado a maximizar la descarbonización.
Innovaciones en diseño y materiales
Una de las claves del Emblème radica en la reducción del 70% de la huella de carbono en la producción de sus componentes. Este modelo incorpora un 50% de materiales reciclados y casi todos los elementos utilizados son reciclables al final de su vida útil. La colaboración entre ingenieros y diseñadores ha permitido encontrar soluciones aerodinámicas y energéticamente eficientes que culminan en un elegante shooting brake de 4,80 metros.
El interior del vehículo está diseñado para ofrecer una experiencia moderna y poética que invita al viaje. Destaca una gran pantalla panorámica openR que abarca todo el salpicadero y una innovadora tecnología que permite impulsar el automóvil tanto con electricidad como con hidrógeno, favoreciendo así viajes más sostenibles.
Estrategia global hacia la movilidad sostenible
Renault Group se posiciona como un actor clave en la movilidad baja en carbono. Tras el Acuerdo de París de 2015 sobre cambio climático, la compañía adaptó su estrategia para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y contribuir a limitar el calentamiento global por debajo de los 2 °C. Con un objetivo ambicioso de alcanzar cero emisiones netas a nivel mundial para 2050, Renault busca lograr esta meta en Europa para 2040.
Fabrice Cambolive, CEO de Renault, resalta que el proyecto Emblème no solo es un concepto atractivo sino también un vehículo demostrativo que invita a disfrutar del viaje: “La ambición era lograr la máxima descarbonización sin comprometer la estética o funcionalidad.”
Análisis del ciclo de vida y metodologías aplicadas
El análisis del ciclo de vida (ACV) es fundamental para evaluar los impactos ambientales del Renault Emblème desde la extracción hasta el reciclaje. Según este análisis, el modelo eléctrico Megane E-Tech presenta unas emisiones totales de 25 toneladas CO2e, mientras que el Emblème alcanza solo 5 toneladas CO2e, lo que representa una reducción cercana al 90%.
Dicha cifra ha sido validada por expertos independientes del IFPEN (Institut Français du Pétrole et Energies Nouvelles). La metodología utilizada considera cada fase del ciclo vital del vehículo, incluyendo suministro, fabricación, uso y fin de vida.
Ecodiseño como pilar fundamental
Aspirando a limitar las emisiones a solo 5 toneladas CO2e, Renault ha aplicado un enfoque ultraeficiente en ecodiseño desde las primeras etapas del desarrollo del Emblème. Este proceso incluye una búsqueda constante por minimizar la huella ambiental a través del diseño innovador y selección cuidadosa de materiales.
Cléa Martinet, directora de desarrollo sostenible del Grupo Renault, enfatiza que este proyecto refleja una colaboración colectiva orientada hacia soluciones sostenibles: “Renault Emblème es un laboratorio viviente que demuestra nuestro compromiso con la movilidad baja en carbono.”
Cambio radical en el diseño automotriz
Aparte del enfoque ecológico, el Renault Emblème presenta características estéticas modernas. Su diseño fluido combina elementos típicos de un break con detalles deportivos. Con una longitud total que facilita viajes familiares cómodos y espaciosos interiores, este modelo simboliza la continua innovación dentro del segmento automotriz.
A través de tecnologías avanzadas como simulaciones digitales proporcionadas por BWT Alpine Formula One Team, se han optimizado aspectos aerodinámicos esenciales sin sacrificar habitabilidad ni confort. El resultado es un vehículo cuya eficiencia energética se traduce también en disfrute estético.
Sostenibilidad integrada en todas las fases
Todas las decisiones relacionadas con los componentes han sido tomadas bajo criterios estrictos para garantizar una reducción significativa en las emisiones durante cada etapa: desde la elección responsable de materiales hasta procesos productivos eficientes. Más allá del rendimiento técnico, Renault busca establecer una economía circular donde cada elemento pueda ser reutilizado al final de su vida útil.
Con más de veinte socios industriales colaborando en este proyecto innovador, cada uno aporta su expertise para optimizar recursos y minimizar impactos ambientales. Desde tiradores táctiles diseñados por AKWEL hasta llantas ligeras fabricadas por Dicastal utilizando aluminio reciclado, cada componente cuenta con una historia detrás que refuerza el compromiso hacia una movilidad más sostenible.
Caminando hacia adelante: El futuro sostenible
A medida que avanza hacia sus metas medioambientales, Renault continúa explorando nuevas tecnologías como pilas de combustible e hidrógeno para complementar sus motores eléctricos tradicionales. Esta combinación promete ofrecer mayor autonomía sin comprometer el rendimiento ni aumentar las emisiones contaminantes.
Bajo esta visión holística hacia la sostenibilidad y eficiencia energética, Renault Emblème se establece no solo como un avance tecnológico sino como símbolo tangible del futuro automotriz comprometido con el medio ambiente.