Ahora que ya sabes qué es, es interesante que tengas en cuenta cuando cambiar filtro del habitáculo:
De la misma manera que otros componentes, el cambio del filtro de habitáculo dependerá del vehículo del que estemos hablando, así como de las indicaciones del fabricante.
Ahora bien, sí que existen algunas indicaciones que podemos seguir.
Los expertos no recomiendan que la cantidad de kilómetros máxima entre un cambio y otro sea superior a los 30.000 kilómetros. Y no solo eso, si no que deberíamos pensar en hacer el cambio una vez que lleguemos a los 15.000 km.
Podemos guiarnos por algunas señales que nos avisarán de cuando ha llegado el momento:
Llegados a ese momento, habrá que acudir de inmediato a nuestro taller de confianza para que hagan la sustitución de este elemento.
Al contrario de lo que se pueda creer, lo cierto es que no cambiar el filtro del habitáculo no provocará ningún daño en el motor, aunque esto no quiere decir que no vayan a haber problemas.
Lo que ocurrirá es que no mejorará la calidad del aire del interior. Si no se cambia nunca, el aire olerá mal y será más peligroso de cara a personas que tienen alergia.
En el caso de que pongas la ventilación al máximo, notaremos que saldrá poco aire porque el sistema estará obstruido.
Y, cómo ya hemos comentado, un mantenimiento deficiente también podría llevar a que se empañen la luna y así será más peligrosa la conducción.
El filtro del habitáculo tiene una duración que depende del modelo de coche y del fabricante. Quédate con el dato de que tendrás que hacer el cambio sí o sí a los 30.000 km.
Si notas alguno de los síntomas anteriores, el cambio se hará antes.