La sincronización con los iPhone pasará a ser de pago.
Las marcas de coches, en especial las premium, obtienen grandes beneficios gracias a los numerosos extras que ofrecen en sus vehículos.
También ofrecen servicios principalmente online como Wifi o Spotify a cambio de una cuota mensual, ya que requiere un gasto continuo por parte de la marca.
Pero lo sorprendente es que servicios que hasta ahora han sido gratuitos en prácticamente cualquier marca de coches pasen a ser de pago. Y eso es lo que tiene pensado hacer BMW.
Recordemos que Apple Carplay es el protocolo que utiliza Apple para conectar sus iPhone con los vehículos y suele tener un precio de entre 100 y 300 euros según la marca. Obviamente, este precio se desmbolsa a la hora de comprar el coche y no de forma periódica. Sería absurdo cobrar una cuota por usar los asientos calefactables o el equipo de música ¿no?.
Esperemos que esta nueva estrategia de BMW que costará 80 dólares mensuales no siente precedente en otras marcas.