La clasificación ha resultado una sorpresa, relativa, pero sorpresa en definitiva. Aunque los dos Ferrari podían conseguir la pole, nadie esperaba que sacaran tanta diferencia, sobre todo a Hamilton.
Como dicen los futboleros, esta temporada "hay partido". Ferrari sigue demostrando desde la pretemporada que han hecho un gran trabajo de cara a 2018. Siguen siendo los mejores tratando los neumáticos y tan rápidos como los mejores en velocidad punta.
En las tandas largas que simularon en los entrenamientos, los dos equipos estuvieron muy igualados, tal vez un poco mejor Mercedes. Pero no podemos olvidar a Red Bull, que, aunque su motor sea inferior, su monoplaza, probablemente, sea el mejor en cualquier circunstancia. Pueden, incluso, dar alguna sorpresa.
La ventaja de los cuatro primeros es que saldrán a la carrera con neumáticos blandos, al contrario de Red Bull y el resto del top ten que lo harán con ultrablandos. Pueden intantar, aunque parece difícil, hacer sólo una parada, sobre todo si, después de rodar con los blandos, deciden montar los más duros. Los ultrablandos van a durar entre 8 y 12 vueltas de manera efectiva y no parece que ni Ferrari, ni Mercedes los vayan a utilizar. Pero la estrategia nos da muchas veces sorpresas, como hizo Vettel en Bahrein.
Renault si parece que va por el buen camino, metiendo a sus dos coches en Q3. Siempre con Hulkemberg por delante. Ya decía en estos días que para que le ganase Carlos Sainz, todavía le quedaba algo al piloto español y esta vez también se cumplió.
McLaren se presentó en Sanghai sin ninguna mejora y esta vez, además de Renault y el Haas de Grosjean, se vieron superados por Force India. Pero el equipo siempre espera ese plus que les da Alonso en carrera. El asturiano parece muy confiado de entrar otra vez en los puntos. Hasta Barcelona no espera McLaren que se note un progreso real.
La carrera se presenta muy interesante en todas sus secciones. Por arriba, en la "clase media" y por debajo. En esta ocasión ni Toro Rosso, ni Gasly han sorprendido a nadie. Todo lo contrario. Y, una vez más, Sauber y Williams se pelearán por no ser los últimos.