Cientos de motos acompañaron a Marc Márquez por las calles del centro de Madrid como preludio al preestreno de la miniserie documental All In. Esta serie repasa el camino recorrido por el ocho veces campeón del mundo desde su lesión en Jerez 2020 hasta su retorno a la competición tras su cuarta operación en el húmero.
Durante su carrera, Marc Márquez ha corrido y grabado en muchísimos lugares, desde circuitos hasta pistas de tierra o carreteras. Incluso llegó a subir una pista de esquí. Sin embargo, hoy logró algo inimaginable para muchos: recorrer la Gran Vía de Madrid con su moto de carreras, eso si, no la era la pata negra. Esto fue el homenaje que el octocampeón merecía y un acto promocional para su docuserie 'Marc Márquez: All in'.
Llegó con un gran grupo de 350 personas en motocicletas. Las solicitudes se agotaron en tres horas. Había un autobús descapotable que los escoltaba, y entre ellos estaban sus padres Julià y Roser, su hermano Álex, la 'influencer' María Pombo y su marido. Los Sainz no pudieron asistir porque estaban de boda.
El de Cervera aparcó su Honda CBR Fireblade de 1000cc y montó la versión de calle de su RC213V con los colores de Repsol. Se dirigió desde la plaza de España hasta la plaza del Callao y regresó. Durante el trayecto, hacía caballitos, derrapes y soltaba las manos para levantarse en la moto.
Luego Marc Márquez fue a Plaza de España, donde Red Bull y Prime habían montado un escenario enorme. Allí, junto a la periodista Izaskun Ruiz, habló lo que había pasado. "El viaje dando la mano ha sido muy bonito. Es un día especial para las motos, un domingo motorizado en Madrid", dijo.
Hace unos días celebró sus 30 años y el público comenzó a cantarle "Feliz cumpleaños". Le costó no llorar. "Muchísimas gracias", dijo conmovido. "Estoy muy sorprendido: tener una serie documental, cerrar calles, el convoy... Gracias a los que lo han hecho posible.
Además, Marc puso sobre aviso a todos sobre su nueva docuserie "All in". "Me han hecho muchos reportajes idealizados, con sonrisas, pero también vivimos momentos difíciles. Tratamos de abordarlo todo con honestidad, como si estuviera hablando con un amigo en un bar", dijo entre aplausos.
Marc regresó al escenario y preguntó al público: "¿Os ha gustado?". La respuesta de la gente fue unánime: "¡Sí!". Como conclusión de su homenaje en Madrid, Marc animó a todos a luchar por un Mundial, diciendo: "Vamos a lograrlo juntos".
El público respondió y gritó "Márquez, Márquez" tan fuerte que se escuchaba en las calles aledañas. Incluso Carmelo Ezpeleta, el CEO de Dorna (organizadores de MotoGP), lo percibió. Estos momentos son los que generan fanatismo. El octocampeón acudió a la calle y todos le agradecieron.