La etapa: "Contento, en esta segunda parte de la etapa maratón. El orden de salida era negativo para nosotros, tras los camiones, con dunas removidas, pero nos ha salido muy bien llegando en el 'top' 10 y en un buen puesto para la etapa de mañana".
Adelantamientos: "Hoy ha sido un poco modo Le Mans con todo los coches delante, y hemos contado hasta 60 adelantamientos, sin parar, pero bueno había buena visibilidad en las dunas, sin polvo y hemos ido por derecha e izquierda. Hace unos días abría pista y hoy casi salía con las asistencias así que un buen contraste y buen aprendizaje".
Mañana: "Quiero ser competitivo otra vez, es el objetivo, porque las sensaciones son inmejorables y hay ganas de acabar. Que sea una etapa limpia para disfrutar del último día".
Así ha sido hoy: "Todo al límite, todo muy salvaje lo que se vive aquí. Ayer íbamos a un lugar remoto, allí solos durmiendo en literas sin asistencias y hoy teníamos 300 kilómetros de enlace hasta el campamento. Han sido 48 horas enriquecedoras y divertidas adelantando tanto".
La experiencia: "Ha sido todo increíble, fantástico, dos semanas duras de competición, pero una sorpresa muy positiva que ha sido el ritmo. Tras Marruecos tenía la preocupación, al ser etapas de 500 kilómetros, y pensaba que podía estar a muchos minutos de los líderes, y no ha sido así, así que muy contento en ese sentido".
Sensaciones contradictorias: "Es que creo que se exagera todo lo que hacemos. Si hacemos segundo es como si fuera el récord mundial y su volcamos pues igual. Cuando hemos recuperado la cobertura tenía 60 mensajes de amigos preguntándome como estaba... se habla mucho más del vuelco que de hacer segundos u octavos..."